Ellos, como tantos otros jóvenes, son los futuros trabajadores de la sociedad. Alcanzar la madurez no es algo sencillo y mucho menos saber con claridad y, con su edad (entre 16 y 18 años), lo que quieren estudiar y en qué quieren trabajar en un futuro que cada vez está más cerca.
Zahira Nuñez ha podido realizar sus prácticas en el despacho de abogados, Davide Abogados, y dice que su experiencia ha sido gratificante y útil para darse cuenta que quiere seguir su camino para trabajar en este oficio. “He aprendido varias cosas, por ejemplo: las partes de un expediente, revisión de casos, asistencia a juicios, las peculiaridades de heredar, referencias del código civil o algunos apartados del código penal”.
LaborESO es una iniciativa que nace de un convenio entre la Consejería de Educación del Gobierno de Cantabria, la Cámara de Comercio y las empresas y centros que participan. En suma, el programa persigue una aproximación de los estudiantes en el mundo laboral, contribuyendo a transmitirles habilidades necesarias para el trabajo y el empleo. Se busca estimular sus aptitudes y mejorar su conocimiento en la empresa. El resultado es de motivación, refuerza la dirección en la que los alumnos quieren encaminar sus estudios.
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